Transcripción del artículo publicado en el especial «Franquicias y emprendedores» de El Economista, publicado el 8 de septiembre de 2014. En este artículo se habla de las primeras taquillas inteligentes Click&Collect para uso genérico de recogida y entrega de pedidos en el que el cliente final paga por recepcionar sus pedidos en un punto concreto con el máximo horario disponible.
DROP-POINT: LA CONSIGNA INTELIGENTE PARA RECOGER ENVÍOS
La herramienta permite atender, las 24 horas del día, los pedidos generados por el comercio electrónico, que se podrán recoger en los establecimientos adecuados sin necesidad de esperas
El comercio electrónico es ya un mercado en pleno auge. Tanto es así que durante el año 2013, el 55 por ciento de los españoles, un 8 por ciento más que el año anterior, utilizó Internet para realizar sus compras, según un estudio de OMD Resolution. En cambio, el comercio electrónico todavía necesita herramientas físicas para completar sus prestaciones y ampliar así sus posibilidades. De ésto se dio cuenta Pablo Carrillos, director técnico de Drop-Point, por lo que se lanzó al mercado con una nueva iniciativa que mejora las prestaciones para los usuarios de la red, cada vez más numerosos y exigentes. De esta forma, Drop-Point ha revolucionado el mundo del comercio electrónico, aportando una herramienta de ayuda física a un mundo completamente virtual. El primer paso que deben de seguir todos los emprendedores si quieren lanzar un producto innovador es comprender las necesidades del público y del mercado. En el caso de Drop-Point, este proceso de reflexión se gestó en una empresa de transportes, desde la cual comprendieron cuáles podrían ser las demandas de los usuarios del comercio electrónico. “Vimos que cada vez es más complicado realizar los repartos, ya que por un lado estamos menos tiempo en casa para recibir la mercancía y por otro, las compras por Internet están en continuo auge”, asegura Carrillos, quien, una vez detectado el problema, se propuso solucionarlo de inmediato para mejorar el servicio que reciben los usuarios. De esta manera surgió Drop-Point, una herramienta de consigna inteligente para recogidas y entregas de envíos 24 horas al día. “Este servicio supone una ventaja con respecto al envío tradicional de los pedidos de Internet a domicilio, ya que no es necesario estar en casa durante todo el día para recibir algo, o para esperar al mensajero en el caso de una devolución”, apunta Carrillos.
Tramitar los paquetes desde el domicilio
Este sistema automático permite gestionar los pedidos de forma remota y desde casa. Para ello, los clientes deben registrarse de forma gratuita en la web de Drop-Point (www.drop-point.com) y seleccionar la consigna en la que quieren recoger el paquete. “Una vez domiciliado el envío, los clientes reciben un correo y un mensaje de texto al móvil cuando éste se encuentre depositado”, afirma Carrillos. El siguiente paso es acudir al establecimiento donde está la consigna y a continuación introducir en la pantalla el código de entrega, el DNI y la firma del cliente. Sólo de este modo, el cajón que contiene el paquete se abrirá para su recogida. El precio por este servicio, que acaba de aterrizar en el mercado doméstico español, es de un euro por recogida, aunque dentro de esta cantidad quedan excluidos los gastos de envío, que dependen siempre del criterio particular que tenga cada comerciante.
Cámaras cenitales y frontales
Después de localizar un mercado en el que un nuevo producto pueda tener éxito y elegir a qué publico nos vamos a dirigir, es necesario dotar al proyecto de una cierta fiabilidad. Por eso, en lo que respecta a la seguridad del sistema, Carrillos afirma que mantienen un alto grado de control sobre las gestiones que se llevan a cabo en cada una de las consignas. “Todas las operaciones son grabadas por cámaras para verificar la entrega del mensajero y la recepción por parte del cliente de sus paquetes”. Las grabaciones e imágenes captadas quedan registradas en la Agencia Española de Protección de Datos y son eliminadas de forma automática a los 30 días de su creación pero, mientras tanto, todos los movimientos que captan se pueden visualizar a través de Internet. A su vez, el servicio cuenta con un procedimiento para los envíos que no han sido retirados en un plazo máximo de tiempo, y que serán devueltos al lugar de origen tras avisar al destinatario.
Por cuenta propia o franquiciados
En un primer momento, Pablo Carrillos invirtió una cantidad de 20.000 euros para que el proyecto se materializase y, aunque por el momento las dos únicas unidades de consignas se encuentran en Petrer, Alicante, la idea de Drop-Point es implantar este sistema en todo el país, ya sea por cuenta propia o a través del modelo de franquicia en comercios con un horario lo más amplio posible como es el caso de las tiendas, farmacias 24 horas o parkings. Después de terminar sus estudios en la Universidad, Pablo Carrillos trabajó durante dos años en una empresa que se dedicaba a hacer algoritmos de detección de incendios con cámaras frontales. Ahora, aunque el fundador de Drop-Point sigue utilizando cámaras en su trabajo, la función que desempeñan éstas es bien distinta, así como innovadora. Tras dos años en el mercado, Drop-Point se encuentra en pleno proceso de crecimiento y gracias a iniciativas como ésta, el comercio electrónico supera ya el espacio online y continúa consolidándose en los mercados